Justo
en la medianoche del Viernes al Sábado Santo Santo, la procesión de
la Nuestra Señora de la Soledad llama a los ruteños al recogimiento
y la oración. En una estación de penitencia marcada por el retumbar
del cuerpo de tambores enlutados que lleva la procesión. Una
cofradía fundada en 1937, con salida desde la ermita de La Soledad a
las 0 horas, teniendo un recorrido de dos horas y media por las
calles de la villa, pasando por enclaves únicos como el pintoresco
Chorreadero. Esta cofradía ha experimentado una importante
revitalización en los últimos años, contando ya con más de 200
hermanos. Virgen que este año estrena un puñal dorado y un
incensario para la procesión. El responso al final del recorrido,
junto al cementerio parroquial de San Cristóbal está cargado de
emotividad.